4 abr 2012

sistema económico

Los jefes guerreros subordinaron todas las actividades a sus intereses particulares; conquistaron grandes extensiones territoriales paara formar para formar un gran impero cuyas fronteras fueron sólo superadas por los aztecas.

La clase explotada estaba integrada por los trabajadores agrícolas y artesanos (pintores, lapidarios, carpinteros, albañiles, alfareros, hilanderos, tejedores, oficiales de la pluma).

Los toltecas introdujeron la metalurgia y los primeros registros y crónicas verdaderamente históricos, que proporcionan las primeras genealogías de soberanos, caciques y héroes culturales; a ellos se deben elementos característicos como las columnas serpentinas, los chacmoles, atlantes, lápidas de relieves de jaguares y águilas, banquetas decoradas, pilastras con figuras de guerreros y otros temas que exaltan su espíritu y organización militarista.

Política

Organización económica, política y social de los toltecas:
La economía tolteca se basaba en la agricultura, la producción de artesanías, el comercio y el tributo. El estado tolteca se caracterizó por el predominio de la casta militar, la expansión imperialista, las conquistas y los tributos de poblados vecinos.



La sociedad tolteca se dividió en dos clases; el grupo privilegiado estaba integrado por jerarcas militares, funcionarios, el supremo gobernante y los sacerdotes, quienes estuvieron al servicio de la casta militar y se encargaban de atender el culto, los calendarios y la cuenta del tiempo. Los jefes guerreros subordinaron todas las actividades a sus intereses particulares; conquistaron grandes extensiones territoriales paara formar para formar un gran impero cuyas fronteras fueron sólo superadas por los aztecas.

La clase explotada estaba integrada por los trabajadores agrícolas y artesanos (pintores, lapidarios, carpinteros, albañiles, alfareros, hilanderos, tejedores, oficiales de la pluma).



hechos y acontecimientos

Ambos grupos, aunque diferenciados por su cultura y lenguaje, parecen haber formado grupos conjuntos, dirigidos por caudillos, entre los cuales destaca el nombre de Mixcóatl, quién llevaría a sus huestes a establecerse en el área de Colhuacan Iztapalapa. 


Mixcóatl conquistó el mencionado valle, además de los actuales estados de Morelos e Hidalgo.


De acuerdo con la tradición, el dirigente chichimeca, y una mujer procedente de la región de Cuernavaca, llamada Chimalma, engendraron al famoso príncipe Ce Acatl Topiltzin Quetzalcóatl


Ce Acatl Topiltzin Quetzalcóatl quien llevó a los toltecas, una vez establecidos en Tula Xicocotitlan en el actual estado de Hidalgo, a un esplandor y una gran expansión a partir de finales del siglo X d.C. 


la Pirámide de Tlahuizcalpantecutli, que se encuentra sobre un basamento formado por cuatro cuerpos escalonados, enormes esculturas de basalto de casi 5 mts. de alto sostenían el techo del suntuario; estas figuras, conocidas como los Atlantes de Tula, representan guerreros toltecas ataviados con los símbolos de Quetzalcóatl en su advocación de Venus. 


Hijo de Mixcóatl, Ce Acatl Topiltzin Quetzalcóatl gobernó Tula a mediados del siglo X d.C. Se cree que no nació propiamente en Tula sino en una zona del actual estado de Morelos.


Tras la muerte de su progenitor, Ce Acatl Topiltzin se enfrentó a los enemigos de su padre y terminó matando a Tepoztecatl por lo que fue aclamado como gobernador de Tula.


 Durante su mandato es llamado Ce Acatl Topiltzin Quetzalcóatl, pues se convierte en el sacerdote principal de Quetzalcóatl e incluso es la representación de dicha divinidad en la tierra, por lo que lleva una vida ejemplar y casta. 


Si embargo, no todos los habitantes de Tula lo ven con buenos ojos y comienza a tener enfrentamientos con los adoradores de Tezcatlipoca, y son ellos, por medio de engaños, quienes hacen que se embriague y falte a su celibato. Debido a su terrible falta, Ce Acatl Topiltzin Quetzalcóatl debe abdicar y partir exiliado, junto con sus seguidores, a la Península de Yucatán, no sin antes haber prometido su regreso.


Ce Acatl Topiltzin Quetzalcóatl, según cuenta la leyenda, no muere en el exilio, sino que se embarca de nuevo en las costas del Golfo y desaparece en las aguas, convirtiéndose en "la estrella de la mañana". Ce Acatl prometió regresar en cierto año indígena que coincidió con la llegada de los españoles en el año de 1519, lo cual atemorizó a los mexicas, herederos de la cultura tolteca.


Huémac fue prácticamente el último gobernante de Tula, pues en su momento ocurrieron sequías, hambrunas, guerras y toda serie de infortunios que terminaron haciendo que la ciudad sucumbiera durante su mandato.

*1179 d.C. Fin de la hegemonía Tolteca.